También se pueden cocinar los huevos de otras formas: con
salsa picante, fritos, revueltos e incluso horneados. Con sus
curiosos nombres como Huevos flamencos o Huevos revueltos a la
vasca.
El queso también es uno de los ingredientes habituales de las
tapas y llega a participar en tapas exquisitas y muy
sofisticadas como unos higos frescos con queso azul y almendras
caramelizadas, unos esponjosos buñuelos de queso con salsa de
tomate, o unas calentitas empanadillas rellenas de queso y
aceitunas. |